De esta manera, Carlos Estarellas, aseguró esta mañana que no puede cumplir con el pedido de la Asociación Latinoamericana de Derechos Humanos (Aldhu), de separar del concurso de selección de magistrados las carpetas de los jueces que formaron parte de la Corte de Guillermo Castro, ya que solo se podrá “impugnar a los candidatos por lo que establece estrictamente la ley”.

En declaraciones para Citynoticias (89.3 FM en Guayaquil), Estarellas indicó que adelantar un juicio sobre los ex magistrados de la corte de diciembre del 2004, sería “cometer un prevaricato”, y esperará a que se revisen sus carpetas para esclarecer si existe algún impedimento legal en su postulación.

El titular del Comité dijo que en el caso de que algún participante en la selección conste en las listas otorgadas por la Agencia de Garantía de Depósitos (AGD), éstos “estarían cayendo en una prohibición que los alejaría de la posibilidad de ser magistrados de la Suprema”.

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Indicó que la revisión de las carpetas todavía no comienza porque “la ley nos obliga a contratar dos auditoras, la cual se demoró porque en la primera convocatoria pública fracasó, y en la segunda, adjudicamos a una empresa y la otra la pre-adjudicamos, esperando que el lunes ya tengamos las dos auditoras e iniciemos el proceso de selección”.

Según Estarellas, la nueva CSJ puede estar lista a inicios de octubre, y garantizó que el resultado de selección del Comité será “una Corte absolutamente apolítica, libre de presiones gremiales y de cualquier índole”.

Finalmente, el presidente del Comité Calificador anunció que los montos que actualmente posee la entidad no alcanzarán para seguir con el proceso. “Lo único que tenemos son 430 mil dólares, lo que no nos alcanzará para pagar a las auditoras y las publicaciones. Pero ya hablé con el Gobierno y (los funcionarios) prometieron solucionar ese problema”.