Una mujer alemana asesinó a nueve de sus hijos y los enterró en el jardín familiar, en el mayor infanticidio de Europa.

Sabine H., como la identifican los medios, es una asistente de dentista desempleada, de 39 años, que quedó embarazada por primera vez a los 17 y que a lo largo de dieciséis años, entre 1988 y 2004, mató y enterró a nueve hijos recién nacidos, todos de distintos padres.