Las condiciones sanitarias mejoraron en la escuela Alberto Perdomo; pero hay más enfermos.

Las familias del Plan Piloto del Suburbio están preocupadas ante la aparición de nuevos casos de hepatitis A en la zona: cada día aparecen nuevos sospechosos de padecerla.

Las versiones sobre la responsabilidad son diferentes, pues todos dicen respetar las normas de salubridad. 

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Aunque la cisterna de la escuela Alberto Perdomo está en buen estado y el contenido de cloro residual del agua es de 0.35 mg -el aceptado para consumo humano-, según los técnicos de Interagua, allí se presentan 8 de los 10 casos.

Las condiciones del bar de la escuela son de aseo; en la esquina,  una señora que no se identificó vende tortillas y empanadas de verde. Al respecto, la directora del plantel, Lila Ruffini, dijo desconocer el hecho, pero se quejó de que la recolección de basura no es diaria y eso perjudica el ambiente del sector.

Javier Carrillo, director de Salud, advirtió que este reborte podría pasar, porque la enfermedad tiene de quince a veintiún días de incubación y los primeros casos se dieron en ese periodo; los habitantes del lugar, como Carmen Vera, temen que los niños que están enfermos ahora contaminen a otros y la crisis continúe.

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Vachagnon e Interagua

Ayer estuvieron en la escuela los representantes de Interagua, Vachagnon y la Subsecretaría de Salud. También Carlos Mosquera, en representación del Instituto Nacional de Higiene, quien se llevó los registros que mantenía Hugo Duarte, médico de la escuela Alberto Perdomo Franco. 

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El temor de los moradores, como Cecilia Vera, continúan por la calidad del agua potable que dicen recibir en sus casas. Ella estuvo en la escuela y aprovechó la presencia de las autoridades de salud para pedir que el sector no sea olvidado y que continúen los controles para la zona.

Juan Carlos García, jefe de operaciones de Vachagnon, dijo que han cumplido con su trabajo no solo en esa sino en toda las escuelas de la zona, y acordaron reunirse para organizar nuevas mingas en el sector afectado por casos de hepatitis viral tipo A.

Insistió en que la recolección en la zona debe ser interdiaria (tres veces a la semana) y manifestó que la parroquia Febres Cordero es la más organizada en la recolección de basura; sin embargo, es donde más se observa basura a media calle y desperdigada a la hora de la recolección, a lo largo de la calle A.

Fernando Alvarado, vocero de Interagua manifestó a Ruffini que sí han cumplido con lo que se comprometió la concesionaria en referencia a las peticiones planteadas, aunque la limpieza de los pozos no se ha hecho, porque los representantes barriales no le entregaron un listado de las casas que necesitaban.

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Guillermo Leone, representante de ese gremio, reconoció que no entregaron el listado de las viviendas afectadas y se comprometió a hacerlo el martes próximo.

El subsecretario de Salud, Federico Cedeño, repartió 600 frascos de complejo B para los afectados en la zona y dijo que estarán pendientes de la escuela.

La Dirección Nacional de Servicios Educativos (Dinse)  mantiene paralizada la construcción de baterías sanitarias y ninguno de sus representantes estuvo en el lugar.

VIRUS

Afectados
Los niños con hepatitis confirmada por laboratorios particulares son: Steven López, Carlos Cevallos, Joselín Granda,  Heidi Ponce, Ángel López,  Jonathan Rivera,  Gustavo Quimí, Ginger Lindao, Heidi Castañeda y Freddy Bowen. 

Muestras
Técnicos de Interagua tomaron muestras en las acometidas de la 24 y la P, 19 y la P, 26 y la L, donde el cloro residual era de 0.40 a 0.50 mg /l.  Hoy continúan los recorridos.

Trabajadores de Salud
Pese a encontrarse allí laborando, los trabajadores de la Subsecretaría de Salud afirmaron que trabajan sin que se les cancele sus sueldos hace dos meses.