Un atacante suicida hizo estallar este viernes un cinturón lleno de explosivos que ceñía su cuerpo entre una multitud de reclutas del ejército iraquí en una población cercana a la frontera con Siria, matando al menos a 25 personas e hiriendo a otras 35, dijo un alto funcionario policial.

El ataque ocurrió en Rabiah, a unos 370 kilómetros al norte de Bagdad, dijo el general Saeed Ahmed.

Rabiah se halla a unos 10 kilómetros al este de la frontera siria, a lo largo de la principal carretera que va a Mosul.