En declaraciones recogidas ayer por el diario británico The Daily Telegraph, Beatte Telle, de 59 años, asegura que el realizador no habló con ella tras la muerte de su esposa, Sharon Tate, asesinada por una secta en 1969 cuando estaba embarazada.

Telle no quiso prestar declaración en el juicio por libelo que el cineasta presentó contra la editorial de la revista estadounidense y por el que obtuvo cerca de 91 mil dólares por daños y perjuicios al ganar la demanda el pasado 22 de julio, pero su testimonio confirma la sentencia del tribunal.

Polanski “nunca me dijo que haría de mi otra Sharon Tate”, reconoció la ex modelo, con la que los abogados de Vanity Fair intentaron contactar sin éxito para pedir su declaración en el juicio.

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Telle recordó que el cineasta simplemente se quedó mirándola fíjamente durante mucho tiempo. 

El artículo fue publicado en el 2002 y se señalaba en él que Polansky “inundó con su encanto polaco” a una beldad sueca, en Elaine s, un famoso restaurante de Manhattan, y prometió a la mujer hacer de ella “otra Sharon Tate”.

Gracias a una autorización del tribunal londinense, Polanski, de 71 años,  compareció en el juicio iniciado el lunes de la semana anterior mediante una videoconferencia desde una habitación de hotel en París, para evitar su extradición a EE.UU., donde está acusado de violar a una menor.

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El realizador se declaró culpable en 1977, en EE.UU., de haber  mantenido relaciones sexuales con una niña de 13 años, y sin esperar la  sentencia huyó a Francia, desde donde no puede ser extraditado por tener la  ciudadanía.