Ayer la presencia de los dos doctores de Barcelona, Bosco Mendoza,  padre e hijo, fue oportuna, no solo para atender los casos de recuperación de Paúl Alarcón, Edwin Villafuerte y Franklin Corozo, sino también porque en mitad de la práctica, el defensa Augusto Poroso se torció  la rodilla derecha que le generó una molestia al entrenar.

No obstante, los galenos revisaron inmediatamente al zaguero y según un diagnóstico preliminar de Mendoza Alvarado  “fue solo una torción”, que no afectará en mayor grado la participación del zaguero en el encuentro de mañana, en Quito.

Otro futbolista que de acuerdo con la evaluación del médico Mendoza Rojas estará recuperado para actuar ante los albos es el lateral derecho Corozo, quien presentaba una molestia en su pierna derecha.

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Sobre el caso del arquero Villafuerte, quien presenta una distensión en el muslo derecho, Mendoza Alvarado informó que tendrá una semana más de recuperación.