Empleados no saben hasta dónde llega el alcance de la competencia concedida al Municipio.

Incertidumbre es lo que experimentan los empleados y usuarios que acuden a las dependencias del Registro Civil en el norte y sur de la ciudad.

Aquello se debe por el desconocimiento sobre la competencia que le fue concedida el pasado 15 de julio al alcalde Jaime Nebot por parte del presidente Alfredo Palacio.

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El secretario de Comunicación de la Presidencia, Andrés Seminario, fue quien anunció que el régimen había aceptado transferir la competencia del Registro Civil de Guayaquil al Municipio.

Quienes laboran en la institución sienten temor por no saber qué pasará con su futuro laboral.

“No sabemos si pertenecemos al Municipio o a dónde, lo único que queremos es que respeten nuestros puestos de trabajo”, mencionó una empleada que pidió el anonimato, pues según dijo “después me ponen en la lista negra”.

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Entre las dudas más comunes de los usuarios está el no saber si tendrán que sacar una cédula nueva o si portarán dos documentos.

“Yo soy de El Triunfo pero vivo en Guayaquil. ¿No podré utilizar las instalaciones del Municipio?”, se preguntó Fausto Quinde.

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Este usuario afirmó que le gustaría esperar a que las nuevas oficinas municipales den el servicio, pero a su vez mencionó desconocer cómo será el funcionamiento.

“El Alcalde debería sacar propaganda donde exponga qué servicios tendrán esas nuevas oficinas”, añadió Marcos Benítez, otro usuario, quien ayer acudió a la oficina del sur (Av. Veinticinco de Julio) a sacar  su cédula.

Incluso el jefe provincial del Registro Civil, Abdón Calderón, dijo no tener información que le permita saber qué áreas ha obtenido el Municipio.

“No sé nada, no tengo idea de qué mismo va a pasar”, expresó Calderón, al tiempo que agregó que a él no le ha llegado ningún documento en el que le indiquen que la competencia ya le fue concedida al Municipio.

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 “Yo me he enterado por los medios de comunicación, de ahí oficialmente no me han hecho saber nada, estoy igual que los usuarios”, indicó.

Maribel Contreras, quien la mañana de ayer se acercó al Registro para obtener un certificado de soltería, manifestó su preocupación porque a decir de ella, “cuando se lleven estas oficinas al Municipio allá va a costar todo y yo soy pobre”. Contreras cree que los costos de los servicios se incrementarán en las oficinas municipales.

En cuanto a los precios, Nebot indicó que serán similares a los que se cobran actualmente en el Registro.

En días pasados el alcaldeNebot dijo que no habrá inconvenientes con los empleados del Registro Civil porque no pasarán a depender del Municipio, pero tampoco se quedarán desempleados.

Ellos, indicó, estarán en el edificio donde laboran actualmente (en la Av. Veinticinco de Julio) y prestan servicio a otros cantones de la provincia.