Por primera vez Francisco Pujilí y sus tres hijos adolescentes, de 15, 14 y 12 años hablaron abiertamente de sexualidad, del cuerpo humano y de cómo enfrentar los cambios de la adolescencia.

Lo hicieron en la charla de orientación que la Corporación Hogar de Cristo ofreció el pasado sábado a los trabajadores y su familia.

Treinta empleados de la entidad asistieron a la charla, que fue impartida por la doctora Verónica Ortega y la especialista en orientación familiar, María Helena Manrique de Lecaro.

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El encuentro empezó a las 09h00 con una integración entre padres e hijos, que buscaba entablar vínculos de confianza para que ambas partes se abran al diálogo.

Luego, la doctora dictó una charla médica, en la que explicó el funcionamiento del cuerpo humano, de los órganos reproductores y los cambios a los que se ven expuestos durante la pubertad.

“Luego de la charla viene el diálogo entre padres e hijos para rescatar el verdadero sentido de la sexualidad partiendo del núcleo familiar”, explica Manrique.

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La idea, dice, es que no esperen a que llegue la pubertad para enfrentarla sino que aprendan de forma autónoma lo que es bueno y malo para su cuerpo y mente y puedan tomar decisiones propias sobre su sexualidad.

Al final, a los jóvenes se les hace la propuesta de fijar como meta la abstinencia sexual hasta llegar al matrimonio.

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Para ello escuchan experiencias de jóvenes que han adquirido este compromiso.

Sonia Arreaga, jefa de Recursos Humanos de Hogar de Cristo, indica que las charlas surgieron frente a las inquietudes de los trabajadores que, al igual que Francisco, no encontraban la forma de responder a las interrogantes de sus hijos.