La policía británica reveló ayer una imagen captada por circuitos cerrados de televisión en la que se ve a los cuatro suicidas horas antes de que llevaran a cabo los ataques en Londres del pasado 7 de julio que acabaron con la vida de al menos 55 personas.

La imagen fue captada en la estación de tren de Luton, al norte de la capital británica, minutos antes de que los cuatro tomaran un tren hasta la estación de King’s Cross.

La policía también confirmó, por primera vez, los nombres de los cuatro atacantes: Mohammed Sidique Khan, de 30 años, Germaine Lindsay (19), Hasib Hussain (18), y Shahzad Tanweer (22), fueron captados por el circuito cerrado de televisión a las 07h20 locales del pasado jueves 7 de julio.

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Ayer el gobierno de Jamaica confirmó que Lindsay nació en la isla caribeña pero se fue cuando niño.

La policía reveló la imagen en un intento por obtener más información del público sobre los posibles últimos movimientos de los suicidas.

Ideología del mal
El primer ministro británico, Tony Blair, aseguró que llegó la hora de hacer frente a la que calificó de “ideología del mal” que provocó los ataques de Londres.

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En un discurso ante el Foro Nacional de Política del Partido Laborista, Blair negó que los ataques fueran fortuitos o respondiesen a la política exterior de Londres y los atribuyó a la estrategia de unos fanáticos que quieren imponer al mundo su ideología.

Blair respondió así a algunos sectores políticos británicos que han empezado a manifestar que los ataques son una respuesta a la política exterior de su gobierno y sobre todo a la guerra en Iraq.

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El gobierno británico examina reforzar sus leyes antiterroristas para facilitar a los tribunales y a la policía la prevención de nuevos ataques.

En los próximos días se consultará a los diputados  sobre proyectos de inclusión de tres nuevos delitos: formación en productos y  técnicas de atentados, incitación “indirecta” al terrorismo y “actos  preparatorios” para cometer ataques.

Esta medida va destinada a poner trabas a los jóvenes británicos que  realicen cursillos en Afganistán o Pakistán, como hicieron tres de los  kamikazes de Londres, según fuentes oficiales paquistaníes.