Menos de dos meses después de haber borrado un 3-0 en contra para vencer al Milan en la final de la Liga de Campeones, medirse a un modesto equipo galés, bautizado con el nombre de una compañía de informática, Liverpool no debería pasar mayores apuros.
  
Obligado a comenzar la defensa de su corona en la primera fase de clasificación, Liverpool siempre supo que el azar le asignaría un equipo totalmente desconocido.
  
Pero el partido del miércoles será lo más grande en la historia del Total Network Solutions.
  
El club galés tiene su sede en Llansantfraid, pueblo de 1.000 habitantes, situados a unos 100 kilómetros de Liverpool.
  
La mayoría de los futbolistas del TNS son hinchas del Liverpool y siete semanas atrás miraron por televisión la memorable victoria de los ingleses sobre el Milan, en una definición de penales en Estambul.
  
Liverpool logró el favor de la UEFA para que defendiese su título, ya que no se clasificó entre los cuatro primeros de la liga inglesa, y deberá rodar desde el mismo comienzo de la competición.
  
Ello significa medirse con un equipo que nunca ha se encontrado con alguno de los titanes del fútbol europeo. TNS, el bicampeón de Gales y previamente conocido como el Llansantfraid FC, usualmente es eliminado antes que los grandes entran en escena en la Liga de Campeones
  
Así las cosas, el delantero del TNS Mark Lloyd-Williams, con salario de 1.044 dólares semanales, se topará con el capitán del Liverpool Steven Gerrard, cuyo emolumento semanal será de 174.000 dólares, según su nuevo contrato de cuatro años.
  
Se espera que Liverpool alineará con buena parte de su arsenal, incluyendo debutantes como el arquero español José Reina y el volante holandés Boudewijn Zenden.