La banda tenía como centro de operaciones la capital colombiana y contaba con conexiones en Ecuador, indicó el Departamento Administrativo de Seguridad (DAS).

El organismo explicó en un comunicado que la red ofrecía “sus servicios” en Ecuador, donde entraba en contacto “con personas interesadas en viajar a Estados Unidos”.

Los presuntos traficantes entregaban a los menores documentos de nacionalidad colombiana falsificados, agregó el DAS, que indicó que cobraban 12.500 dólares por facilitar la migración ilegal.

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Por el hecho fueron capturados Olga Páez y Raúl Castillo, en Bogotá. Antes ya había sido detenido por secuestro Rafael Melo, en Ipiales.