Desde las 00h00 de hoy, al menos 200 miembros de las Fuerzas Armadas vigilan los barrios suburbanos de Guayaquil y realizan controles antidelincuenciales.

Esta medida se hizo pública ayer, en la reunión que mantuvieron el presidente de la República, Alfredo Palacio; el gobernador del Guayas, Guido Chiriboga; el alcalde de Guayaquil, Jaime Nebot; y autoridades militares y policiales, en el salón Libertadores de la Gobernación de la provincia.

El anuncio se produjo luego de que la Escuela Superior Politécnica del Litoral (Espol) presentó el miércoles pasado las estadísticas contratadas por el Municipio y las Cámaras sobre delitos en Guayaquil, las cuales, según el informe, han reducido.

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Aunque no se especificaron los lugares adonde se realizarán los controles, Chiriboga aseguró que “la ciudad está protegida”, al referirse a la labor de los guardias privados y de la Policía en las zonas críticas de la urbe.

“No es hora de criticar (el plan Más Seguridad propuesto por el Municipio guayaquileño).
Apoyemos las iniciativas porque los resultados se verán a medida que pase el tiempo y no inmediatamente”, dijo.

Nebot manifestó que “las Fuerzas Armadas actuarán hasta que se concrete la adquisición de armamento para la Policía” y que los militares realizarán controles para detectar armas y equipos de comunicación ilegales. “Los usuarios deben llevar permisos para portar armas y  matrículas de los vehículos. Los equipos de comunicación sin autorización también serán decomisados”, agregó.

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El Primer Mandatario aseveró que es responsabilidad del régimen incentivar iniciativas que garanticen la seguridad ciudadana y faciliten “la creación de una nueva democracia en el país”.

El coronel Raúl Banderas, jefe de Estado Mayor del Comando Aéreo de Combate, dijo ayer, luego de la reunión entre el Presidente de la República, el Gobernador del Guayas y el Alcalde de Guayaquil, que las Fuerzas Armadas realizan labores de inteligencia para determinar las zonas más vulnerables.