Según dos de tres convenios,  la ayuda militar china asciende  a casi un millón y medio de dólares.

La apertura de los contenedores que transportaban una donación del gobierno chino para el Ministerio de Defensa decepcionó ayer al diputado Guillermo Haro (ID), presidente de la Comisión de Fiscalización del Congreso, y a Ricardo Vanegas, vocal de la Comisión Anticorrupción, quienes esperaban encontrar armas como lo denunció el diputado Carlos González (ID) el miércoles pasado en Quito.

La única sorpresa en el contenido fue que en un cajón que transportaba a uno de los dos aviones ligeros donados por China, se hallaron cajas con siete sacos de arroz, botellones de aceite de cocina, fideo chino, enlatados, salsas, entre otros productos, que ni siquiera el delegado del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, coronel Manuel Samaniego, supo explicar.

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“Supongo que los habrán embarcado por el peso, para el balance del contenedor”, aseguró, y aclaró que el resto de material especificado en la lista de detalle de la donación que les envió la Embajada de China estaba completo.

Esto es 18 paquetes: 9 volquetes, 2 contenedores con equipos para mantenimiento, y repuestos y llantas de los aviones, 5 cajas con repuestos para los volquetes y 2 contenedores con los dos aviones ligeros tipo PT-6.

Según uno de los tres protocolos de la mercadería, el gobierno chino con el ecuatoriano firmaron un convenio de provisión de ayuda militar por un valor de 8 millones de yuanes (unos $ 966,183), el 22 de agosto del 2001. Allí se detallan como contenido dos aviones PT-6; un motor pistón 6 de reserva; 9 instalaciones terrestres agregadas justo con el avión; 2 documentos en inglés; 49 instalaciones de aseguramiento terrestre y 2 juegos de repuestos de los aviones.

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En el segundo protocolo, en cambio, se habla de un convenio similar pero firmado el 16 de abril del 2002 por  4 millones de yuanes ($ 483,091). Ahí se detallan los 9 volquetes como camiones auto de descarga de 6 toneladas; 12 mil vestidos camuflados para el bosque color  caqui (uniformes) y 12 mil gorras camufladas. De esta lista, solo los volquetes continúan en el puerto; los uniformes –según Samaniego– fueron enviados en el 2002.

Existe un tercer protocolo, que no fue proporcionado, porque según Samaniego la Gerencia Distrital de la Corporación Aduanera aún no se lo entrega; mientras que en esa dependencia aseguran que tampoco lo tienen y que son las FF.AA. quienes deben entregárselos a ellos.

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Según Samaniego, la carga arribó el 24 de junio pasado en el buque Lu Shan. Ese mismo día, el ministro de Defensa, Solón Espinosa,  pidió por escrito al jefe del Comando Conjunto, Valm. Manuel Zapater, que autorice la desaduanización, lo que se aprobó también el 24 de junio.

Mientras, Vanegas y Haro afirmaron ayer que hubo irregularidades en el ingreso de estos materiales y que algunos no están declarados. Vanegas aseguró que si los aviones y volquetes no tienen certificados de origen y verificación deberán ser reembarcados. También podrían ser incautados los comestibles.