Más casos sospechosos de hepatitis A en el Suburbio

Nuevas pruebas del Instituto de Higiene descartan presencia de heces fecales en el agua de Plan Piloto.

Los casos no aumentan, según la Subsecretaría de Salud, pero las personas con síntomas de hepatitis A no dejan de llegar al dispensario médico de la escuela Alberto Perdomo Franco, en el sector de Plan Piloto.

El número de afectados se mantiene en 85: 39 confirmados por el Instituto Nacional de Higiene (INH) y 46 diagnosticados clínicamente.

Pero ayer en la escuela se presentaron otros cuatro niños con la enfermedad, que se ha vuelto un problema familiar en el suburbio. En una misma casa se presentan dos y hasta tres afectados con vómito, molestia abdominal y coloración amarilla en la piel.

Es el caso de los hermanos Andrea Anda Pin, de 4 años, y Miguel Anda, de 8, quienes llegaron ayer a la escuela con los exámenes confirmatorios. O el de la familia Morán Suárez, cuyos integrantes: Kerly, de 11 años; Elsa, de 5; y John, de 4, dieron positivo en una prueba realizada la semana pasada, pese a que solo la primera presentó síntomas.

A ellos se suma el caso de Joshué Puga, de 6 años, alumno de ese plantel, que ayer acudió con síntomas del mal; el de Mabel Ortiz, de 14 años, habitante de la 25 y la Q; y Liseth Jordán, de la escuela Guayas. A todos se les solicitaron exámenes de laboratorio.

Según Javier Carrillo, director provincial de Salud, ya no son necesarias las pruebas del INH para derterminar el virus, porque se sabe que el brote es del tipo A. Los cuadros sospechosos, dijo, se determinan por el nivel de enzimas hepáticas y los síntomas clínicos.

Las enfermedades, según moradores y los médicos Hugo Duarte y Tomás Ruiz, continúan dándose por el agua.

Miguel Delgado, técnico en agua potable del Observatorio Ciudadano de Servicios Públicos, respaldó su versión. Para él, el problema central es la falta de alcantarillado porque obliga a la creación de pozos sépticos en las viviendas.

“Si el subsuelo está alimentado de heces fecales y hay flujos  por horas hay más posibilidades de que las tuberías y redes se contaminen”, dijo.

Sin embargo, los nuevos resultados que el INH emitió ayer descartan la presencia de heces fecales. Las pruebas, cuyas muestras se tomaron el pasado 22 de junio, se realizaron en cisternas, acometidas de aguas y en las llaves de negocios y escuelas del sector. En la Perdomo Franco dieron negativas las muestras tomadas en la acometida, pero hace dos semanas salieron con coliformes las de la cisterna.

El informe también determinó que el agua de la muestra 6, de la cisterna de la iglesia evangélica de la Q y la 24 no cumple con la norma INEN 1.108 para agua potable.
 
La situación llevó a Carrillo y al subsecretario de Salud, Federico Cedeño, a entregar cinco máquinas procesadoras de cloro a los centros de salud del sector para que fabriquen el producto y lo distribuyan a la comunidad. Con una medida de una tapa rosca, indicó Cedeño, se pueden purificar 20 litros de agua.

Los funcionarios mantuvieron una reunión con el gobernador, Guido Chiriboga, delegados de Interagua y Plan Piloto. Allí la concesionaria se comprometió a limpiar los pozos sépticos de las escuelas.

Mañana, a las 10h00, habrá una audiencia pública en la Defensoría del Pueblo, con Interagua y Vachagnon para que den su informe sobre los servicios que prestan en la zona.

La Defensoría entregará el viernes el informe de las pruebas que tomó el lunes y ayer.