Cuadrillas de bomberos combatían el domingo incendios forestales que han provocado evacuación de pueblos, cierres de autopistas y nubes de humo negro en el sudoeste del estado de Utah, Estados Unidos.

Continuaban las órdenes de evacuación el domingo en el pequeño pueblo de Gunlock y la pequeña reservación Shivwits debido a los incendios que cubrían unas 24.282 hectáreas de bosques.

Las temperaturas llegaban a los 32 grados centígrados y los vientos aceleraban el avance de las llamas por el césped y arbustos engrosados por la lluvia invernal.

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Limita nuestra capacidad y dificulta controlarlo, comentó Brian Cardoza, un bombero de 32 años de Idaho City, que llevaba cinco días combatiendo los incendios.

Los bomberos trataban de controlar incendios en California, Arizona y Nevada que habían consumido más de 80.939 hectáreas de bosques.

Unidades de bomberos no lograron contener el sábado los incendios en Utah y las autoridades anunciaron que posiblemente no serían controlados totalmente hasta el jueves.

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Los habitantes de Gunlock, 418 kilómetros al sudoeste de Salt Lake City, fueron evacuados el sábado cuando las llamas se encontraban a unos 6 kilómetros de distancia del pueblo. Las llamas de unos tres metros de altura eran visibles a la distancia desde la autopista, mientras otro incendio provocado por un rayo saltó a la carretera y la mantuvo cerrada por unas siete horas durante la noche.

En la madrugada del domingo, el jefe de bomberos de Utah, Dave Dalrymple, advirtió a las cuadrillas de bomberos:   tengan cautela y hagan las cosas con calma.

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Este es sólo en comienzo de una temporada muy, muy larga, destacó Dalrymple.