Los tres niños que aparecieron muertos a última hora del viernes en el maletero de un automóvil fallecieron por asfixia, según confirmó hoy la Policía, que descartó la posibilidad de un acto delictivo.

Los cuerpos de Aníbal Cruz, Daniel Agosto y Jesstin Pagan, de 11, 6 y 5 años respectivamente, fueron descubiertos cuando un familiar de las víctimas abrió el maletero en búsqueda de unos cables de arranque para la batería de su coche.
El padre de uno de los niños, que estaba justo detrás del vehículo presenció horrorizado, en medio de llantos y gritos de espanto, el trágico suceso.

Los agentes descartaron la posibilidad de que se tratase de un crimen, aunque todavía no se ha esclarecido cómo los investigadores que habían rastreado la zona en la que aparecieron los pequeños -desaparecidos desde la tarde del miércoles- no los encontraron antes.

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Edwin Figueroa, el jefe de policía de la localidad de Camden, Nueva Jersey, señaló en una rueda de prensa poco después de conocerse la noticia que si los investigadores hubiesen comprobado el maletero poco después de haber acudido al lugar de los hechos, los niños podrían seguir con vida. "Todavía es prematuro determinar qué errores se cometieron, en caso de que se cometiese alguno", afirmó.

Uno de los niños tenía la costumbre de jugar dentro del vehículo y los investigadores creen que los tres amigos se subieron al automóvil y quedaron atrapados después de que la puerta trasera se cerrase automáticamente.