Diversos sectores de Nicaragua recibieron con  cautela la propuesta del presidente Enrique Bolaños de adelantar las elecciones  nacionales de noviembre del 2006, para desmontar una crisis de ingobernabilidad  que vive el país.

“Las propuestas se hacen en la mesa de diálogo (...) no queremos estar  respondiendo a través de los medios, vamos a sentarnos sin condiciones para que  las partes fijemos nuestras posiciones”, manifestó la hija del ex presidente Arnoldo Alemán y diputada María Dolores Alemán.

La legisladora es delegada del Partido Liberal Constitucionalista  (PLC-derecha) en un frustrado diálogo con la oposición -en el que participaba el Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN, de izquierda)-, y  del cual se retiró el gobierno alegando incumplimientos de las otras partes.

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El sandinista Álvaro Baltodano puso en entredicho al mandatario y aseguró que intentaría influir en el proceso.

Bolaños propuso el lunes pasado acortar su periodo y adelantar las elecciones de noviembre próximo, pero lo condicionó a una Asamblea Constituyente que renueve los poderes del Estado, como una solución a la pugna con los poderes legislativo y  judicial.