Con la entrega de la terna de los gobiernos seccionales para ubicar a un representante de ese sector en el Tribunal Constitucional, el miércoles pasado culminó la primera parte del proceso de conformación de ese organismo, que estuvo a cargo del Tribunal Supremo Electoral (TSE).

El TSE debía convocar a los colegios electorales de las cámaras de la producción, de los trabajadores, indígenas y campesinos; y de los alcaldes y prefectos del país. Una vez recibidas las ternas de esos tres grupos y notificadas al Congreso, le corresponde ahora a esa función del Estado  continuar con el proceso, señaló el viernes el presidente del TSE, Gilberto Vaca (PSC).   La semana pasada el TSE notificó al Legislativo sobre las nóminas recogidas.

El TC lo componen  nueve vocales: seis le corresponden al Ejecutivo, al Congreso y a la Corte Suprema de Justicia (dos cada uno); y  tres a los colegios electorales (un representante por colegio).

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Aún están pendientes las  ternas  del Ejecutivo, de la Corte Suprema de Justicia y  del Parlamento. Pero al no existir CSJ, el TC deberá trabajar con dos vocales menos, afirmó el diputado Andrés Páez (ID).

Explicó que ese proceso será manejado directamente por los jefes de bloques de cada partido y  el Presidente del Congreso.

Estimó que en un plazo de quince días puede culminar la selección una vez que el Presidente de la República envíe su nómina.