En solo una escuela del suburbio hay nueve casos. Las autoridades no adoptan medidas.

Un nuevo brote de hepatitis tipo A surgió en varias escuelas del suburbio oeste de la ciudad.

Hasta el momento existen nueve casos confirmados en la Unidad Educativa Alberto Perdomo Franco, ubicada en la 24 y la P; cinco casos en la escuela Progreso para el Suburbio, en la 23 y la L; y un caso en la escuela Alicia Riofrío, situada en el Segundo Callejón P y la 19. Y más de treinta enfermos en toda el área circundante.

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El brote ha atacado mayormente a los niños. De los casos reportados, Gilson Piloso, de 13 años, y que cursa el octavo grado, está asilado en el hospital Francisco de Ycaza Bustamante donde recibe tratamiento.

Su madre, Eufemia Moreira, manifestó que le hizo las pruebas de laboratorio luego de que el médico de la escuela se los ordenó. Las pruebas resultaron positivas. 

Félix Carrera, jefe del área de gastroenterología, donde se encuentra asilado Gilson, señaló que se le volvieron a practicar los exámenes pero que será mañana cuando el Instituto de Higiene envíe los resultados.

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En la escuela hay preocupación. Hugo Duarte, médico de la escuela, revela que son varios los alumnos que presentan síntomas.

La directora de la escuela, Lila Ruffini, inició gestiones en la jefatura del área 5 para evitar que la enfermedad se propague. La respuesta a su pedido fue la promesa de dar charlas educativas para los padres y alumnos.

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El malestar de un grupo de padres de familia se convirtió en indignación cuando recorrieron los baños sucios, los patios con bancas dañadas acumuladas y una caja de aguas servidas destapada y rebosada.

José Alfredo Llerena, padre de familia, señaló que cobran 15 dólares por la matrícula y no le parecía justo que los baños no estén reparados.

“Una sola vez nos llamaron a una minga. Estoy seguro que ningún padre se negaría a colaborar si con eso se evitan epidemias” aseguró José Arévalo, padre de un estudiante.

Petita Vítores, tras escuchar al médico y a la directora, llevó a su hijo que estudia en la escuela particular Dora Ramírez, ubicada en la misma zona, para que lo examine. 

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Luego de las pruebas de rutina el médico detectó ictericia (coloración amarilla en los ojos) el estómago inflamado y la orina con color oscuro. Le envió los exámenes correspondientes, aunque dijo que estaba casi seguro que era otro caso de hepatitis. 
 
La situación se repite en la comunidad, y la respuesta al porqué del rebrote de la enfermedad es evidente.

Sobre la calle P (en el muro de la escuela) se amontona la basura: desperdicios de comida en sacos y fundas, y hasta perros muertos.  

Según los moradores el problema no es el horario de recolección, pues indicaron que Vachagnon cumple con su tarea; pero cerca de allí hay un mercado y aunque dejan limpio el espacio que ocupan, acumulan los desperdicios en el exterior del plantel.

Alfonso Cortez vive frente a la escuela y se queja del desaseo y agrega que no son solamente las personas del mercado, sino también los vecinos que acumulan la basura en las esquinas. 

Las clases en la escuela Alberto Perdomo fueron suspendidas desde el lunes pasado hasta mañana.
Pero los padres de familia dudan de enviar nuevamente a clases a sus hijos. El riesgo por la insalubridad es latente. 

“El barrio se ha vuelto criadero y cementerio de animales. En algunas casas crían puercos, otros vienen a la esquina a botar perros muertos. Los municipales desalojaron varias veces el mercado, pero se vuelven a poner en las calles”.
Ana María Serrano
Moradora del sector

“El problema no es solo en las escuelas sino  en la comunidad, pero nadie se preocupa, la basura  está por todas partes y eso atrae a las ratas y las plagas. El Municipio debe sancionar a los que botan los desperdicios en las calles”.
José Cervantes
Morador del sector

“En la jefatura del Área 5 de Salud lo que me dijeron es que enviarían oficios a la Dirección de Salud para dar charlas de prevención, pero con charlas no se resuelve nada”.
Lila Ruffini
Directora de la Unidad Educativa Alberto Perdomo Franco

HEPATITIS A
Contagio

De una persona a otra por vía fecal-oral, entre los homosexuales se observa transmisión directa. Han ocurrido pocos casos de transmisión por transfusión de sangre de un donador que estaba en el periodo de incubación, aunque han sido raros.

Virus

Los brotes que provienen de una fuente común, generalmente son provocados por agua contaminada y alimentos preparados por manipuladores infectados, como sándwiches y ensaladas crudas o manipuladas después de su cocción.

Prevención

Identificar el modo de transmisión por investigación epidemiológica, y detectar a la población expuesta a un mayor peligro de infección. Identificar y eliminación de la fuente común de infección. Mejorar las prácticas de higiene.