Un avión de carga de la segunda guerra mundial apenas evitó árboles y casas mientras su tripulación realizaba un aterrizaje forzoso en una calle de Fort Lauderdale. Las tres personas a bordo sobrevivieron.
 
Aunque están hospitalizados, los tres   podían sentarse y hablar por sus teléfonos celulares horas después de la caída, dijo la vocero médica María Soldani el lunes. Dos personas que estaban en la zona también resultaron heridas, una de ellas de gravedad.
 
El avión, un DC-3 en vuelo a las Bahamas, se estrelló a unos cinco kilómetros al este del Aeropuerto Ejecutivo de Fort Lauderdale poco después de despegar, dijo Greg Martin, vocero de la Administración Federal de Aviación.
 
El copiloto le dijo a los bomberos que una tubería de combustible se rompió y uno de los dos motores de la nave estalló en llamas antes de la caída, indicó Stephen McInerny, jefe asistente de operaciones de los bomberos de Fort Lauderdale.
 
El piloto Charles Riggs, el copiloto Charles Wirt y el pasajero Héctor Espinoza estaban en buen estado en el Hospital de la Santa Cruz. Los otros dos lesionados también recibían tratamiento.