El ex presidente deberá responder a la justicia como cualquier ciudadano “por las injurias que ha dicho”, señaló ayer el presidente del Fondo de Solidaridad, Marcelo Arcos.

Tras desmentir que tenga una relación de consanguinidad o afinidad con Palacio, Arcos dijo que lo ayudó a solucionar una deuda de 60.000 dólares, porque “los intereses le estaban ahorcando” y por la relación de amistad y confianza que hay entre sus familias  hace varios años.

De su parte, mediante un comunicado, el Banco del Pichincha aclaró ayer que Palacio fue deudor de la institución hasta antes de ser vicepresidente de la República.

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En el comunicado se señala  además que nunca se conoció providencia alguna en contra del presidente y directores de la entidad, que hubiese sido emitida por los miembros de la anterior Corte Suprema de Justicia, presidida por Guillermo Castro Dáger.