La adaptación para que el motor a gasolina de un carro funcione con gas licuado de petróleo tiene costos que varían de $ 150, cuando se lo hace en forma artesanal, hasta $ 650, si se lo realiza con piezas importadas y que cumplen con las respectivas normas de calidad.

Ese es el único gasto que realiza el dueño del automotor y el resultado es inmediato: circular sin pausa durante 12 horas con un cilindro de 15 kilos, a un costo de $ 1,60. Por eso la masificación del consumo de gas en los automotores.

En Guayaquil existen tres sitios autorizados, que cumplen las normas INEN, donde se hacen las adaptaciones y se venden repuestos. En cambio, hay decenas de talleres que ejecutan trabajos en forma artesanal, a un costo de $ 150 y $200.

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“Hay equipos que se hacen en forma casera, solo colocan la manguera del tanque de gas a la boca del carburador, con una llave que regula de acuerdo a la aceleración. Esos carros son bombas de tiempo”, destaca Daniel Pérez, gerente de un taller autorizado que funciona en la Garzota, IV etapa.

Pérez señala que el boom de las adaptaciones a gas se dio desde el 2001. Incluso se ejecutan trabajos en vehículos particulares de lujo, especialmente tipo V6 y V8. En el taller del entrevistado, actualmente se adapta a gas un promedio de 20 carros por semana y se comercializan repuestos para 50 sistemas. Los costos en este local fluctúan entre $ 400 y $ 650, según la calidad de los materiales.

Pérez aclara que las piezas garantizadas son las que se importan de Italia y Estados Unidos. Por ejemplo, para que exista absoluta seguridad, las cañerías deben estar a prueba de 1.200 cci (libras de presión).

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¿Qué ocurre con un carro a gas que tiene que pasar la revisión en la CTG? César García, presidente de la Unión de Taxistas del Guayas, explica: “El sistema es desmontable y se lo saca; el carro funciona a gasolina en el chequeo”.

El dirigente señala que lo fundamental es que el gobierno y la empresa privada se empeñen en colocar los surtidores para que los taxistas adquieran el gas sin subsidio, porque el uso de este combustible está autorizado por ley. “Así costara $ 8 el cilindro, igual se economizará”, dice el taxista Julio Mendoza.