El Gobierno ha anunciado que convocará a consulta popular en el mes de diciembre. Ha anunciado también que la responsabilidad de la organización corresponde al Vicepresidente y al Consejo Nacional de Modernización.

Se ha dicho ya que todos los ciudadanos pueden hacer llegar sus propuestas acerca de los temas para la consulta y que son múltiples las vías para hacerlo, incluso la telefónica.

Sin embargo, es necesario que conozcamos el método de sistematización y priorización que se empleará, pues es posible que las iniciativas ciudadanas abarquen muchos y variados aspectos, y que incluirlos todos vuelva larga y engorrosa la consulta. Hasta se corre el riesgo de que lo más importante quede fuera y se favorezca lo accesorio.

En todas las ciudades del país hay grupos de ciudadanos pensando en cuáles y cómo deben ser los cambios que requerimos para lograr un país capaz de progresar en democracia y con justicia. Y todos aspiran y, así debe ser, a que sus propuestas sean tomadas en cuenta, pero también es posible que algunas sean contrapuestas.

Por todo esto, es importante que conozcamos con anticipación el método y el cronograma y, sobre todo, que tengamos claro de qué manera vamos a asegurarnos de que una vez más la decisión de la ciudadanía no sea burlada como ha ocurrido en anteriores consultas. Pues todos recordamos que la mayoría de los ciudadanos decidió una manera de darle independencia a la Corte Suprema de Justicia y que esta fue burlada, para citar solo un ejemplo.

Además, esta vez, el proceso tendrá algunas diferencias, pues no solo se tratará de que la ciudadanía responda algunas preguntas sino de que participe en la elaboración de ellas y hay mucha gente discutiendo y razonando para hacer propuestas que reflejen el anhelo del pueblo. Y lo hacen con entusiasmo y dedicación.

Grave sería, pues, que el resultado de esas reflexiones no fuera tomado en cuenta o que las expectativas no sean satisfechas y la gente se sienta burlada.

Tenemos una excelente oportunidad de avanzar en democracia, de hacer un verdadero ejercicio de participación, pero para evitar frustraciones es importante que conozcamos con anticipación las normas, para que nadie tenga la tentación de cambiar las reglas una vez que se ha iniciado el juego.