A 6’1 millones de dólares asciende el monto de la droga incautada en Miami (Estados Unidos) y que se encontraba escondida en bananos de procedencia ecuatoriana, indicaron autoridades aduaneras de esa ciudad.

Según publicó ayer el diario El Nuevo Herald, las cajas de la fruta real estaban mezcladas con cartones que contenían bananos falsos construidos unos con fibra de vidrio y otros de poliespuma, pintados de color verde como los originales, en cuyo interior estaban escondidas 750 libras de clorhidrato de cocaína (340,9 kilos).

La publicación señala que la fruta y el alcaloide ingresaron al puerto de Miami el pasado 9 de mayo y que los investigadores sabían ya de su existencia, gracias a una información de inteligencia.
Tres días después, relata el diario, procedieron a la apertura de las cajas y notaron que entre las frutas verdaderas había otras “más pesadas y de un color ligeramente diferente”, por lo que al abrirlas descubrieron media libra de cocaína en su interior.

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Las autoridades revelaron que el valor de cada uno de esos plátanos cargado con media libra de cocaína asciende a 4 mil dólares.

Según el director de operaciones del Departamento de Aduanas y Protección de Fronteras, Thomas S. Winkowski, citado por El Nuevo Herald, el descubrimiento de los falsos plátanos es “una de las más altas incautaciones” de drogas en el sur de la Florida en lo que va del año.

“Esto demuestra realmente un alto grado de sofisticación (por parte de los traficantes a cargo de este envío), lo cual nos obliga a ser cada vez más vigilantes, porque esta droga en las calles representa un peligro serio para la comunidad”, valoró Winkowski.

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Sin destinatario

Los agentes no revelaron a quién o quiénes iba destinado el cargamento, cuyas cajas indicaban que procedían de Ecuador, aunque no se especificó de qué empresa procedía, señala ese medio escrito.
El agente especial del Departamento de Inmigración y Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés), Keith Perniciaro, dijo que usualmente este tipo de cargamento viene a nombre de un agente consignatario, que no es el destinatario final. “Es una forma de engañarnos, de que perdamos la pista”, añadió.

En una conferencia de prensa donde desplegaron las cajas de plátanos, Winkowski explicó  que el cargamento llegó al puerto de Miami en dos contenedores y 168 cajas de cartón.

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“Uno estaba en orden, eran plátanos genuinos; pero en el segundo encontramos esto que ustedes pueden ver, decenas y decenas de plátanos falsos de fibra de vidrio y poliespuma”, afirmó.

Winkowski dejó que los periodistas pudieran tocar los falsos plátanos, de unos 20 centímetros de largo, cuyo exterior se apreciaba totalmente sellado y sin fisuras.