El Parlamento ecuatoriano se apresta a "pedir cuentas" a militares y policías por el desamparo en el que quedó el presidente Alfredo Palacio el mes pasado cuando, en medio de manifestaciones, permaneció encerrado cinco horas en un edificio.
 
El 20 de abril, en medio de las crecientes protestas populares, el Parlamento destituyó "por abandono del cargo" al presidente Lucio Gutiérrez y aplicó la sucesión contemplada en la Constitución que determina como sucesor al vicepresidente, en este caso, Palacio.
 
Poco después de haber jurado su cargo como jefe de Estado ante el Parlamento en las instalaciones del Centro Internacional de Estudios Superiores de Comunicación para América Latina (Ciespal), Palacio debió permanecer en esa sede, que estaba rodeada por decenas de manifestantes que exigían que "se vayan todos" los políticos.
 
Durante unas cinco horas se desconoció la suerte de Palacio, que, según revelaciones posteriores, no tuvo protección de la Policía o de las Fuerzas Armadas, instituciones que ni siquiera respondieron a los llamados de auxilio del nuevo jefe de Estado.
 
"Eso no puede quedar sin aclararse. Fui testigo de la angustia que pasó el presidente Palacio, llamando desde el edificio de Ciespal a los jefes militares y de Policía sin tener ninguna respuesta", dijo hoy el presidente del Parlamento, Wilfrido Lucero, en una reunión con la prensa extranjera.
 
Lucero, quien estuvo también encerrado en la sede de Ciespal, que resultó dañada por los manifestantes, dejó entrever que las llamadas de Palacio a las autoridades a cargo del orden público eran prácticamente desesperadas.
 
"Era un verdadero clamor, los llamaría, sin exagerar, unas cincuenta veces y nunca hubo respuesta. Estuve allí presente corriendo el mismo riesgo", dijo Lucero, de la Izquierda Democrática, uno de los partidos de oposición al gobierno de Gutiérrez.
 
"No tuvimos ningún resguardo de nadie, no quisieron cumplir con sus obligaciones y eso no puede ser tolerado en un país democrático", puntualizó al tiempo de asegurar que contribuirá con las investigaciones y "les pediremos cuentas".
 
El Parlamento se prepara para recibir, en una fecha aún por determinar, al ministro de Defensa, Solón Espinosa, para que explique las investigaciones efectuadas en las Fuerzas Armadas sobre el desamparo a Palacio.
 
Las aseveraciones de Lucero se producen en momentos en que la prensa local, basada en fuentes militares, informó de que el pasado 22 de abril se intentó fraguar un golpe de Estado en contra de Palacio, denuncia que está aún bajo investigación.