Francisco Epifanio Alvarado Vera, de 34 años, y Édison Ricardo Pérez  Andrade, de 30, fueron asesinados a disparos y luego quemados por pobladores de la comuna La Aguadita,  en la parroquia Colonche, quienes los identificaron como ladrones de chivos, informó ayer la Policía.

El hecho se conoció el domingo pasado, luego que los familiares de Alvarado denunciaron su desaparición y se organizó un operativo policial para su búsqueda.

El jefe peninsular de la Policía, coronel Fausto Gavilánez, dijo que los cadáveres de Alvarado y Pérez fueron localizados el lunes pasado y trasladados a la morgue del cantón La Libertad, donde sus familiares los reconocieron por las dentaduras postizas.

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Gavilánez señaló que en esa comuna fue detenido Santos Mejía Aguas, quien declaró que el ataque de los comuneros sucedió el sábado pasado.

Según el reporte policial, Mejía reveló que ese día fletó un vehículo Toyota blanco, de placas  GCX-495, y que con Alvarado, Pérez y otro sujeto apodado Chicle se dirigió a la comuna La Aguadita, donde tenían previsto sustraerse algunos chivos, pero que al llegar fueron interceptados por al menos diez comuneros que iban en una camioneta azul.

Mejía señaló que uno de los sujetos acusó a Alvarado, quien conducía el auto, de ser el autor de los robos y que le disparó con una cartuchera, por lo que él y Chicle huyeron. “Alvarado y Pérez no pudieron salir del carro”, añadió.