Por primera  vez en esta temporada Alonso no subió al podio en F1.

El finlandés Kimi Raikkonen, al volante de su McLaren-Mercedes, ganó sin dificultades el Gran Premio de Mónaco, sexta prueba del campeonato del mundo de Fórmula 1, ayer en el circuito del principado, consiguiendo su segunda victoria consecutiva.

La supremacía del finlandés no se vio amenazada en ningún momento. Pero sí fue una carrera de gran intensidad para los puestos de honor, que ocuparon el alemán Nick Heidfeld y el australiano Mark Webber.

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La de Raikkonen fue su cuarta victoria como piloto en la F1, ratificando el buen momento que atraviesa, luego de una semana en la que lució inmenso tanto en los ensayos como en la clasificación. “Es una victoria especial porque este es un sitio especial”, declaró Raikkonen.

El líder del mundial, el español Fernando Alonso (Renault), que en buena parte de la carrera ocupó la segunda posición, bloqueó durante muchas vueltas a Heidfeld y Webber. El alemán acabó por adelantar al español en el frenado de la chicana en la vuelta 71 (de 78), aprovechando la enorme degradación de los  neumáticos del español.

Dos vueltas después, el australiano intentó la misma maniobra pero Alonso conservó su plaza. Pero Webber no se dio por vencido y lo intentó en la siguiente vuelta, retrasando aún más su frenado. Alonso atajó una vez más pero el australiano logró superarlo.

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Hasta el final de la carrera, el Renault de Alonso estuvo amenazado por otro grupo de perseguidores formado por el McLaren-Mercedes del colombiano Juan Pablo Montoya (quinto), el Toyota de Ralf Schumacher (sexto) y los Ferrari de Michael Schumacher (séptimo) y del brasileño Rubens Barrichello (octavo).

El asunto se resolvió en la última recta, donde Schumi adelantó a su compañero de equipo mientras los demás conseguían mantener su lugar.

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Para Montoya su quinto puesto es casi inesperado porque salió desde el final de la parrilla tras ser penalizado por provocar un accidente en los entrenamientos libres.

BÓLIDOS

Raikkonen dijo que “pude controlar  la carrera. Logré atacar y crear una distancia considerable para, cuando  llegara el momento, entrar en boxes y recuperar mi lugar en  la clasificación. Luego pude relajarme un poco”.

Alonso sigue al frente del mundial con 49 puntos, pero Raikkonen ahora se encuentra segundo con 27, dejando claro que la disputa del título se dirimirá entre ambos. Fue la primera vez que el piloto español de Renault no pudo figurar en el podio.

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EL HOMBRE DE HIELO, como llaman a Raikkonen, le hizo un regalo perfecto a los ingenieros de Mercedes, que celebraban sus 200 carreras en la F1.

MIENTRAS MCLAREN y Renault peleaban por la supremacía, la escudería italiana Ferrari estiró a siete su seguidilla de carreras sin victorias. Michael Schumacher sumó 2 puntos al terminar la carrera en el séptimo lugar. 

SU CARRERA se arruinó cuando golpeó la parte posterior del Red Bull del británico David Coulthard en
 un choque múltiple que involucró a cinco monoplazas y que ocurrió cuando el Minardi del holandés Christijan Albers quedó cruzado en la zona de Mirabeau y bloqueó la pista en el giro 25.

COULTHARD,  que corriendo para McLaren ganó dos veces el Gran Premio de Mónaco, se retiró al final de ese giro mientras que Schumacher, con la zona delantera de su Ferrari arrancada, ingresó a boxes para reemplazar la parte faltante.

TRAS EL  reacomodo Raikkonen figuró al frente con el italiano Jarno Trulli (Toyota) situado segundo y Alonso, tercero. Trulli abandonó en la vuelta 66 cuando su bólido quedó averiado al salirse en una curva, buscando desplazar al italiano Giancarlo Fisichella (Renault), quien estaba quinto hasta ese momento.