Mostrando por qué es el número uno del mundo, Roger Federer derrotó ayer al adolescente francés Richard Gasquet 6-3, 7-5, 7-6 (4) para defender su título en el Másters de Hamburgo y llevarse su sexto campeonato del año.

Al vengar una de solo dos derrotas en lo que va del año, Federer agigantó un récord de la era de torneos abiertos: ahora lleva 19 victorias consecutivas en finales. 
 
Con su tercera consagración en Hamburgo en cuatro años, Federer mejoró su foja este año a 41-2. Si se remonta al US Open del año pasado, Federer exhibe marca de 57-2.

Una de esas derrotas fue contra Gasquet el mes pasado en cuartos de final del Másters de Montecarlo.

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Ayer, Federer tomó control del partido desde el comienzo y no aflojó, aunque Gasquet nunca fue presa fácil.

“Una vez que ganas una o dos veces aquí, uno llega al torneo con confianza”, declaró Federer, quien no perdió un solo set camino al título número 28 de su carrera.

Gasquet, de 18 años, se asoma como una versión más joven de Federer: ambas pegan con dinamita sus remates desde el fondo, conectan el revés de una sola mano y cubren cada rincón de la cancha. “Sabía que iba a ser complicado. Hoy demostró lo bueno que es”, dijo Federer sobre el rival.  La clave estuvo en que el suizo fue netamente superior para definir los puntos importantes. 

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El torneo de Hamburgo, con una bolsa de $ 2,7 millones, es de preparación para el Abierto de Francia, que comienza dentro de una semana. Roland Garros es el único Grand Slam que Federer no ha ganado.