Los analistas económicos: Pablo Lucio Paredes, Mauricio Pozo Crespo, Abelardo Pachano Betero, César Robalino, y Walter Spurrier Baquerizo, exhortaron este viernes a “no perder el rumbo” y a mantener una política económica que se mantenga alejada de cualquier intención populista.

Los profesionales publicaron un comunicado en la prensa nacional para preservar la estabilidad macroeconómica, una vez que esta condición es considerada necesaria para combatir la inequidad.

Por ello, advirtieron que no se puede agregar al problema político, otro económico que altere el camino seguido por este último aspecto en los últimos años. 

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Solicitaron  que se preserven los techos de gastos y endeudamiento constantes en la Ley Orgánica de Responsabilidad Estabilización y Transparencia Fiscal (Feirep). Señalan que la derogatoria de esta norma provocará el retorno al recrudecimiento del endeudamiento, que traerá consecuencias nefastas para la estabilidad.

Los analistas señalan que sin sanidad fiscal el actual sistema monetario de dolarización, el futuro económico y,  sobre todo, los pobres de Ecuador se verán afectados.

Otra de las recomendaciones de los analistas es procurar que los valores correspondientes al FEP (Fondo de Estabilización Petrolera) y Feirep actúen para defender a la economía nacional y que solventen las necesidades cuando se produzca la caída de los ingresos públicos.

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Una optimización de la calidad del gasto público es necesaria a criterio de los profesionales. La intención es que, de esta manera, se invierta más y mejor en la educación, salud, ciencia y tecnología.  De esta manera exhortan a administrar mejor los fondos “que se despilfarran” en el fondo de Solidaridad y en el Ministerio de Bienestar Social.

Los analistas explican que no hay mejor política social que una sana política económica, estrechamente ligada a programas sociales y dirigidos a mejorar las oportunidades de las familias de bajos recursos.

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Finalmente, Lucio, Pozo, Pachano, Robalino y Spurrier indicaron que la crisis política no debe derivar en perder “la sensatez y cordura que requiere un manejo maduro y responsable de la economía”.