Ecuador y Colombia fortalecerán una posición conjunta, incluyendo también a Perú, para encarar el último tramo de las negociaciones que sostienen con Estados Unidos para suscribir este mismo año un Tratado de Libre Comercio (TLC).
 
A esa conclusión llegaron este viernes en Quito los ministros de Comercio de Ecuador, Oswaldo Molestina, y el de Colombia, Jorge Humberto Botero, quienes se reunieron en esta capital para analizar el estado de las negociaciones con EE.UU., entre otros asuntos de interés bilateral.
 
Colombia, Ecuador y Perú negocian desde el año pasado el TLC con EE.UU., acuerdo que se prevé entre en vigor en el segundo semestre del año, aunque su aplicación depende de la aprobación de los parlamentos de cada uno de los cuatro países.
 
Molestina, por su parte, confirmó que la próxima ronda de negociaciones del TLC, la décima, se efectuará en la ciudad ecuatoriana de Guayaquil entre el 6 y el 10 de junio.
 
La X Ronda en Guayaquil "será de suma importancia para el destino de las negociaciones", aseguró Molestina, tras reclamar una mayor flexibilidad de EE.UU. a los asuntos "sensibles" para los andinos, como son los temas de agricultura, subsidios, políticas sociales y laborales, propiedad intelectual y acceso a mercados.
 
Además, consideró que en las negociaciones Ecuador aparece como el país de menor desarrollo comparativo, respecto a los otros tres países, por lo que exigió un trato preferencial.
 
Molestina también aceptó la posibilidad de que el tratado comercial con EE.UU. sea sometido, antes de su suscripción, a una consulta popular, pues recordó que hay muchos sectores sociales y económicos que temen que el acuerdo perjudique al país.
 
"Debemos avanzar en el proceso buscando beneficios para el país", aunque al final el acuerdo pueda ser sometido a la decisión popular, insistió Molestina.
 
El ministro colombiano, por su parte, precisó que los andinos han logrado consensuar posiciones para fortalecer la participación de cada uno de ellos frente a los propuestas estadounidenses.
 
"La concertación que persistentemente hemos hecho los países andinos durante todo el proceso ha sido útil, nos ha fortalecido frente a los Estados Unidos y ha enriquecido nuestra confianza recíproca en nuestra comprensión de los problemas que nos son comunes", comentó Botero.
 
Sin embargo, recordó que la última decisión será una responsabilidad soberana de cada uno de los países. "Colombia anhela que los tres países andinos podamos culminar lo que juntos iniciamos", recalcó el ministro de Comercio de Colombia.