Los componentes del sistema inmunológico, las proteínas y metabolitos de los niños autistas son diferentes a los de los pequeños que no padecen ese problema, revelaron ayer investigadores estadounidenses.

En una presentación ante la IV Reunión sobre Investigaciones del Autismo, los expertos indicaron que su descubrimiento podría ser un importante paso hacia el desarrollo de una prueba de sangre que permitiría detectar el autismo en niños recién nacidos.