Varios de los productores del Litoral, cuyos sembríos se destruyeron por las lluvias el mes pasado, serán considerados por el Banco Nacional de Fomento (BNF) para obtener nuevos créditos, indicó el gerente de la entidad, Álex Alcívar.

Con asesoría del BNF, los productores deben hacer un reporte sobre los daños en sus  cultivos; este documento tendrá que ser entregado al banco, que a su vez lo trasladará a la compañía aseguradora. Es así como, tras las lluvias, el seguro agrícola debe asumir el monto de los daños, con lo cual el banco y el productor se liberan de la deuda, explicó Alcívar. Una vez que se determine el total de los perjudicados, la entidad hará un análisis de quiénes pueden acceder a nuevos compromisos.

Actualmente, en el país se siembran alrededor de 260.000 hectáreas de arroz; de las cuales 20.000 son financiadas por el BNF. Se da preferencia a los productores cuyas zonas tienen acceso a proyectos de riego y control de inundaciones. Después de verificar que no están en zonas de riesgos, se otorga la preaprobación del seguro agrícola, con lo cual se da paso al crédito.