La recta final del proceso de regularización que fenece este sábado se ha vuelto una lucha contra el tiempo para los ecuatorianos, quienes abrigan la esperanza de que un milagro les permita conseguir los documentos para presentar su solicitud.

El guayaquileño Alfredo Urbano Torres, de 24 años, es uno de ellos, según expresa, el principal problema que enfrentan los ilegales es la falta de un permiso de trabajo. En su caso, desde que llegó a España, hace un año, ha tenido que vivir de la solidaridad y ayuda de sus amigos.

También es uno de los pocos que participa y ayuda en la coordinación de la huelga que siguen más de 400 ‘sin papeles’ en exigencia de la ampliación del plazo del proceso de normalización.

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Norma Falconí, líder de Plataforma por la Regularización sin Condiciones, anunció ayer que los huelguistas endurecerán la medida, si la delegación del Gobierno y Generalitat (Cataluña) no admiten públicamente que están mediando para llegar a un acuerdo.

Doris Melo, cónsul adjunta de Ecuador en Barcelona, explicó que en las últimas dos semanas se da preferencia a la atención a los ecuatorianos que tienen el pasaporte caducado y necesitan renovarlo para adjuntar a los documentos requeridos e ingresar la solicitud al proceso de regularización.