El presidente estadounidense, George W. Bush, saludó el miércoles los informes sobre la captura en Pakistán del número tres de Al Qaeda, Abu Faraj al-Libbi, al calificar el hecho de "victoria esencial" en su guerra contra el terrorismo.
 
"La captura de un alto responsable de Al Qaeda, Abu Faraj al-Libbi,  representa una victoria esencial en la guerra contra el terrorismo", afirmó  Bush durante un discurso en Washington.
 
"Al-Libbi era un general de primer plano para Bin Laden, uno de los  principales organizadores de la red Al Qaeda", agregó el presidente de Estados  Unidos.
 
"Su detención elimina a un enemigo peligroso, una amenaza directa para  Estados Unidos y para todos los que aman la libertad. Felicito al gobierno  paquistaní por su eficaz cooperación en la guerra contra el terrorismo",  declaró.
 
"La lucha continúa, seguiremos a la ofensiva hasta que Al Qaeda sea vencida", destacó Bush.
 
Abu Faraj al-Libbi fue capturado en la región tribal paquistaní de Norte-Waziristán, fronteriza con Afganistán, con otros cinco militantes de la  red de Osama bin Laden, indicó el miércoles el ministro paquistaní de  Información, Cheij Rashid.
 
El portavoz de la Casa Blanca, Scott McClellan, estimó que la detención de  Abu Faraj al-Libbi representa "el mayor éxito desde la detención de Khaled  Cheij Mohammed" en marzo de 2003 en Rawalpindi, ciudad vecina de Islamabad.
 
Las autoridades paquistaníes estiman que Abu Faraj sucedió a Khaled Cheij  Mohammed a la cabeza de Al Qaida en Pakistán.

Estados Unidos había ofrecido una recompensa de cinco millones de dólares  por su captura y Pakistán otra de 20 millones de rupias (285.000 euros).
 
El presidente paquistaní, Pervez Musharraf, lo había mencionado como  organizador de dos tentativas de atentados con explosivos llevadas a cabo  contra él.