Al menos quince personas, doce de ellas presuntos insurgentes, murieron hoy en un combate entre fuerzas estadounidenses y un grupo de hombres armados cerca de la conflictiva ciudad iraquí de Ramadi, al oeste de Bagdad.
 
Según un comunicado del mando militar norteamericano, la escaramuza se libró junto a un puesto de control compartido con las fuerzas iraquíes en la carretera que une Ramadi con la frontera de Irak con Jordania.
 
En el enfrentamiento, ocurrido a unos setenta kilómetros al oeste de Ramadi, también perdieron la vida un soldado iraquí y dos civiles.
 
La batalla se desató cuando un grupo de hombres armados atacó el citado puesto de control, explicó el comunicado.
 
Al menos cinco de los atacantes fueron posteriormente capturados por los marines del Primer Batallón del Quinto Regimiento de los Marines, agregó.
 
Este es el segundo combate que las fuerzas estadounidenses libran en las últimas 24 horas con presuntos insurgentes en la noroeste de Iraq, una zona conocida como "el triángulo suní", corazón de la insurgencia en el país. 
 
De acuerdo al mando militar, doce presuntos insurgentes perdieron la vida en un tiroteo entablado de madrugada en los alrededores de la localidad de Qaim, cerca de la frontera con Siria.
 
En el enfrentamiento también resultaron heridos una niña de seis años y seis soldados de la fuerzas de la Coalición, explicó la fuente sin facilitar la nacionalidad de los uniformados.
 
El mando militar estadounidense subrayó, sin embargo, que los presuntos insurgentes eran miembros de un grupo supuestamente vinculado con el brazo de la red terrorista internacional Al-Qaida en Iraq.
 
Según la nota, unidades de los marines habían iniciado el lunes la búsqueda de estos supuestos terroristas, alertados por el descubrimiento de un camión sospechoso.
 
Los ocupantes del vehículos abrieron fuego contra los soldados cuando fueron interceptados por las fuerzas norteamericanas, que debieron recurrir a la ayuda aérea, apostilla el texto.