Los hechos políticos suscitados durante el mes de abril causaron una notable caída en el índice de confianza empresarial medido por la encuestadora Deloitte & Touche, alcanzando 86,4 puntos de 250 puntos posibles (8,3 menos que en marzo).

Según la firma, se planteó a los empresarios que se identifique cuál es el principal problema que tiene el país, y el 50% contestó que el manejo político, seguido de la inestabilidad jurídica (36%) y la falta de atención a los problemas sociales y de educación.

De acuerdo al estudio, el 40% de los encuestados considera que habrá una mayor inflación respecto al mes anterior. De igual manera, existe una percepción de incremento en las tasas de interés, “lo cual es lógico si se considera que en ambientes de incertidumbre se incrementa el riesgo de crédito”, dice Deloitte.

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Sin embargo, los encuestados del sistema financiero creen que la calma en el país se logrará en corto plazo y no habrá razón para incrementar el costo de las operaciones.

Las expectativas del empresariado ecuatoriano, indica, se centran en las acciones que el nuevo Gobierno tomará.