Después de que este martes, el Congreso Nacional destituyó, vía resolución, a los vocales y miembros de los tribunales Constitucional (TC) y Supremo Electoral (TSE), el Legislativo se plantea la reorganización de la Corte Suprema de Justicia (CSJ) y la forma de elección de sus magistrados.

En declaraciones para Citynoticias (89.3 FM en Guayaquil), el diputado Andrés Páez (Izquierda Democrática), indicó que el Congreso “ha constituido una comisión calificadora y no nominadora”, que se encargará de evaluar a los aspirantes, y asignar los cargos de magistrados de acuerdo a la calificación que obtengan.

Otro de los artículos aceptados ayer en el pleno del Parlamento fue establecer “veedurías permanentes”, en las que participen la Organización de Naciones Unidas (ONU), la Unión Europea (UE) y la Comunidad Andina (CAN) con el propósito de que “supervisen el proceso y puedan dar cuentas al país si se realizan irregularidades”, explicó el diputado.

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Por otro lado, Páez defendió la elección de Wilfrido Lucero como titular del Congreso Nacional. “La segunda fuerza política del Congreso desde el 2003 ha sido la Izquierda Democrática (ID) y lo que ayer hizo el pleno fue ratificar ese acuerdo, eligiendo al diputado Lucero como su presidente”, afirmó.

Además, desmintió que detrás de la elección de Lucero haya un acuerdo político con los socialcristianos. “El hecho de tener coincidencias parlamentarias con el Partido Social Cristiano (PSC) no conlleva a tener acuerdos políticos, como participar en forma conjunta en una elección”, añadió.

Sobre la “autodepuración” del Congreso Nacional, el diputado de la ID confirmó que continuará. “Ayer fueron once y creo que diez más darán paso a sus suplentes”.

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De acuerdo a Páez, ahora se llevará la causa para los congresistas que hayan realizado tráfico de influencias. “Tenemos denuncias de diputados que han ubicado a casi todas sus parientes en diferentes instancias en las provincias de donde provienen y se han dado el lujo de publicar en la prensa las obras que están haciendo, cuando la Constitución prohíbe a los diputados hacer eso”, aseveró.

Finalmente, precisó que si algún diputado de su tienda política se ve afectado por esas acusaciones, se impondrá la ley. “Si es así, no hay ninguna razón para que nos tiemblen las manos y aplicar la ley como es. No conozco a ninguno, pero si se da el caso, se debería investigar e imponer una sanción”.

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El artículo 129 de la Constitución indica: “El Congreso Nacional elegirá cada dos años un presidente y dos vicepresidentes. Para los primeros dos años, elegirá a su presidente de entre los diputados pertenecientes al partido o movimiento que tenga la mayor representación legislativa, y a su primer vicepresidente del partido o movimiento que tenga la segunda mayoría. El segundo vicepresidente será elegido de entre los diputados que pertenezcan a los partidos o movimientos minoritarios. (...) Para los siguientes dos años, el presidente y el primer vicepresidente se elegirán de entre los partidos o movimientos que hayan obtenido la segunda y primera mayoría, respectivamente”.

En las elecciones presidenciales, cuando también se eligió a los diputados, el bloque más votado fue el PSC, seguido de la Izquierda Democrática. No obstante, los socialcristianos cedieron la presidencia del Legislativo a la ID, cargo que fue asumido en enero del 2003 por Guillermo Landázuri, luego de obtener 62 votos de los socialcristianos, prianistas, ID, DP y Socialismo.

Dos años después, con una mayoría de diputados afín al Gobierno, Landázuri explicaba que la titularidad del Congreso correspondía a su partido. No obstante, el PRE, que también defendía este derecho, el pasado 5 de enero logró 52 votos de 57 diputados presentes, que puso al diputado Omar Quintana como nuevo titular.

 

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