El colegio José Peralta y el recinto ferial de La Propicia sirven de albergues a 60 personas que han sido afectadas por el crudo invierno que sufre la provincia de Esmeraldas y, aunque la intensidad de las lluvias ha bajado, empiezan a presentarse problemas de epidemias en diferentes sectores, lo que causa preocupación a la Defensa Civil Provincial.
Pese a la emergencia, en las bodegas de esta entidad solamente habían unas cuantas vajillas, toldos, plásticos, sábanas y un juego de ollas.
Sin embargo, desde el sábado pasado el nivel de las aguas de los ríos Cayapas, Santiago y Onzole, en los cantones San Lorenzo y Eloy Alfaro, empezó a bajar, por lo que los moradores regresaron a sus casas.
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