Estamos viviendo el epílogo de una situación sociopolítica en la cual todos somos culpables por acción u omisión.

Permitimos que un coronel golpista que se levantó en armas contra el sistema constituido fuera amnistiado por el Congreso para transformarlo en mártir, primero, y luego en héroe para catapultarlo a pesar de su poca preparación cultural a la Presidencia de la República. Nombró como  ministros a personas con poco conocimiento de las áreas en las cuales fueron asignadas, pactó con dueños de partidos, rompió promesas y trajo a ex mandatarios.

Hagamos todos mea culpa de la situación que estamos viviendo y no permitamos que estos hechos queden en la impunidad. Mantengámonos vigilantes para que los culpables vayan a la cárcel y se sienta un precedente para el futuro.

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Ing. Tito Abad Moncayo Parrales
Guayaquil

Fue loable la intervención y reacción del pueblo quiteño ante la catastrófica situación vivida por la anarquía de un gobierno, cortes y tribunales de facto, que mostraban una dictadura.

En tan poco tiempo cayó un presidente más, y no solo debe caer el primer mandatario por las causas que se le imputan y comprobaren, sino que además de conformar los tribunales constitucionales y electorales, hay que nombrar al Contralor General del Estado como lo manda la ley, y debe eliminarse el Congreso Nacional, porque ese  también es el clamor nacional.

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Muestra de aquello es que los miembros de seguridad salvaron de morir a varios diputados.

La gran mayoría que estaba apostada en las calles balbuceaba y maldecía a todo rigor la repudiable y mañosa forma de legislar de toda esta tracalada de incapaces y ladrones mal llamados “padres de la patria”. Hoy el pueblo pide que estos no regresen  más, ¡que se vayan!, que la nueva República tenga gente joven, nueva, con espíritu de servir a la nación, que se destierre de una vez por todas el virus de la corrupción.

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¡Que viva el pueblo de Quito y que viva el Ecuador!

Ing. Jesús Antonio Zambrano Zambrano
Quevedo

Ecuador se unió en masa para combatir la corrupción. ¿Cómo se atrevió Lucio Gutiérrez  ofendernos de semejante forma al permitir regresar al Ecuador a ciertos políticos delincuentes  y que tanto daño hicieron y  saquearon llevándose nuestro dinero?

Si ya huyeron como todo cobarde, que ojalá nunca regresen y si aún no, que vayan derecho a la cárcel. Esperemos que los próximos líderes no nos defrauden, pues ya están alertados de que no nos vamos a dejar humillar y robar de nuevo. Que estén conscientes que lo que queremos es líderes dispuestos a trabajar por Ecuador, generando empleos para disminuir la pobreza. Que entiendan que política significa servir al pueblo y no robar.

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Nora Peralta
Carolina del Norte, EE.UU.