Los miembros de la OEA decretaron el jueves un receso de 24 horas para dar tiempo a Ecuador para responder cómo se produjo el abandono de cargo que se alegó para la destitución del presidente Lucio Gutiérrez.
 
La pregunta fue planteada en una sesión extraordinaria del Consejo Permanente de embajadores por el representante de Panamá Arístides Royo y acentuada por el delegado peruano Alberto Borea con un comentario de que la comunidad interamericana no podía decir que en Ecuador   no ha pasado nada.
 
El representante alterno ecuatoriano Jaime Barberis había informado a los embajadores de 34 gobiernos que la destitución de Gutiérrez se produjo   siguiendo normas constitucionales luego que el Congreso declarara el abandono de cargo del ahora ex presidente.
 
Borea hizo notar que en medio de los acontecimientos que condujeron a la destitución presidencial, Gutiérrez se encontraba todavía en la casa de gobierno impartiendo órdenes que le correspondían como presidente.
 
Dijo también que los congresistas que lo destituyeron lo hicieron en una sesión en la cual no participó por lo menos un tercio del total y que la decisión fue tomada en un local fuera del recinto legislativo.
 
Mientras transcurre el receso, los cancilleres sudamericanos encabezados por el ministro brasileño Celso Amorim se encontraban en coordinación permanente y sus conclusiones servirán de base cuando los embajadores vuelvan a reunirse el viernes a las 10h00 horario local (14h00 GMT).