A diferencia de los últimos días, este jueves la capital ecuatoriana amaneció en calma, pero sus calles reflejaron los estragos de la multitudinaria manifestación que este miércoles contribuyó a la destitución del ex presidente de la República, coronel Lucio Gutiérrez. 

Según informó Gamavisión, las clases en los colegios y escuelas publicas siguen suspendidas, hasta esperar que el nuevo Secretario de Educación sea designado y adopte una resolución.

Bajo el mandato del nuevo jefe de Estado, Alfredo Palacio, Quito recuperó la tranquilidad y normalidad en su casco comercial. También el transporte público circuló sin contratiempos por el norte, centro y sur de la ciudad.