Treinta y un torniquetes se retiraron ayer de los buses urbanos que llegan a la terminal terrestre. A la jornada acudieron discapacitados y jubilados; Patricia Castro Coronel, adjunta segunda de la Defensoría del Pueblo; y miembros de la Policía.

Los torniquetes que se sacaron de los buses se colocaron junto a una pancarta que decía Frente de Defensa de los Jubilados y Pensionistas del Guayas. A cada uno se les inscribía el número del disco y la línea a la que pertenecía.

Castro Coronel sostuvo que en los operativos de la semana pasada en la terminal terrestre y los de febrero pasado, en las avenidas Quito y Machala, se eliminaron 400 torniquetes.

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“Nosotros hacemos respetar la decisión del Juez Sexto de lo Civil, Franklin Ruilova, quien dispuso el retiro de torniquetes de todas las unidades de buses urbanos”, señaló la adjunta segunda de la Defensoría del Pueblo.

Algunos torniquetes se guardan en las bodegas de la Policía. El resto está en las oficinas del Consejo Nacional de Discapacitados (Conadis).

Fernando López, conductor de la línea 66, expresó su descontento por la eliminación del torniquete. “No quería que me lo quiten, pero si ya lo hicieron, ni modo. Lo que necesito es que me lo devuelvan porque tengo que llevármelo. Igual ya no vale”.

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José Hoyos, dirigente del Frente de Defensa de los Jubilados y Pensionistas del IESS, y Castro Coronel le explicaron que si quería el instrumento debía acudir hasta el Juez Sexto de lo Civil y pedírselo. La 90, 66, 110, 111 y 121 fueron algunas líneas de las que se sacó ayer torniquetes.

Castro Coronel comentó que este lunes hubo una audiencia por el juicio que se lleva contra Francisco Giler, presidente del directorio de la Comisión de Tránsito del Guayas (CTG); y Roberto Pólit, director ejecutivo de la CTG, “pero ambos no asistieron, mientras que los discapacitados sí declararon. A los de la CTG se los citará nuevamente”.

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Hoy se tiene previsto continuar con el retiro de torniquetes en la terminal terrestre.