El alcalde de Quito, Paco Moncayo, pidió este sábado la renuncia del jefe del Estado, Lucio Gutiérrez, y rechazó la aplicación del estado de excepción en la ciudad, ordenada anoche por el gobernante.
 
Gutiérrez, "por amor a la patria, por amor a Ecuador, debe dar la salida digna que la crisis requiere, y esa salida que ha pedido el consejo municipal y que pide el alcalde de Quito, es la presentación de su renuncia", afirmó Moncayo en la emisora Radio Municipal.
 
El presidente Lucio Gutiérrez ordenó anoche declarar el estado de excepción en la zona del distrito metropolitano de Quito y, además, disolvió la Corte Suprema de Justicia, institución que ha sido el foco de las críticas desde la última reorganización de jueces ejecutada por el Parlamento en diciembre pasado.
 
Moncayo admitió que el alto tribunal había sido reorganizado de forma inconstitucional por una mayoría parlamentaria afín al Gobierno, que el pasado 8 de diciembre destituyó a los antiguos jueces y nombró en su lugar a otros magistrados ligados a formaciones cercanas a la coalición oficialista.
 
Sin embargo, el alcalde apuntó que la disolución de la actual Corte Suprema, calificada "de facto" por la oposición, es un acto que viola las normas constitucionales.
 
Moncayo anotó que la renuncia de Gutiérrez permitiría la apertura de un proceso de "relevo constitucional" en el poder y de reorganización de las instituciones del Estado, además de restituir "la paz en la República".
 
"El pueblo no puede vivir, como hoy, en una dictadura", enfatizó Moncayo, tras insistir en que el pedido de renuncia a Gutiérrez fue una resolución adoptada por la corporación municipal esta madrugada.
 
La resolución del municipio rechaza también el estado de excepción ordenado por Gutiérrez para el distrito metropolitano de Quito, que limita los derechos a la libertad de expresión, de reunión, al tránsito de personas, a la inviolabilidad del domicilio, de la correspondencia y de las comunicaciones telefónicas.