Los agricultores colombianos advirtieron este viernes que se apartarán de las negociaciones del Tratado de Libre Comercio (TLC) con Estados Unidos, si este país insiste en que se le abran las puertas a sus productos agrícolas, mientras mantiene sus barreras a la producción andina.
 
"No vamos a cometer el error de otros países de aceptar reducción de aranceles y no tener acceso de nuestros productos a Estados Unidos, pero dejar que los de ellos sí lleguen acá", indicó a la AFP, Rafael Mejía, presidente de  la Sociedad de Agricultores de Colombia (SAC).
 
Según el directivo gremial, si Estados Unidos continúa inflexible respecto a las peticiones de los países andinos en el capítulo referente a las barreras sanitarias y fitosanitarias, "nosotros no vamos más en el TLC".
 
Eso significa que la responsabilidad de las negociaciones recaería únicamente en el gobierno.
 
Colombia, Ecuador, Perú y Estados Unidos iniciarán a partir del próximo lunes en Lima (Perú) la novena ronda de negociaciones del TLC, con el objetivo de lograr que las conversaciones -que han sido prorrogadas dos rondas más de lo previsto- concluyan antes de junio próximo.
 
Mejía explicó que cuando se iniciaron las negociaciones, la SAC planteó la  necesidad de que se garantice un acceso real a Estados Unidos de la producción de Colombia, Ecuador y Perú, incluyendo una flexibilización de los controles sanitarios.
 
Según la SAC, lo estricto de los controles que impone Washington hizo que  -exceptuando a las flores- ningún producto agrícola de la zona andina pudiera aprovechar las ventajas del Tratado de Preferencias Arancelarias Andinas (Atdea, por sus siglas en inglés), que Estados Unidos concedió durante las dos últimas décadas como forma de compensar la lucha antidrogas en estas naciones.
 
Por ello, recordó Mejía, se propuso la creación de una mesa con expertos de  los tres países andinos y Estados Unidos sobre los asuntos Sanitarios y  Fitosanitarios.
 
Sin embargo, según el dirigente de los agricultores colombianos, "Estados  Unidos quiere forzar a que (esa negociación) sea bilateral" y planea limitar las concesiones sobre controles sanitarios a "dos o tres productos como la uchuva, perejil y cilantro, limitando el acceso de los demás productos, con lo  cual quedaríamos en una situación de desventaja".
 
El dirigente gremial informó que el tema fue planteado hace dos semanas al secretario de Agricultura de Estados Unidos, Mike Johans, quien mostró una posición intransigente.
 
"A él se le olvida que la producción agrícola de los Estados Unidos dejará  unos excedentes del 14% anual que tienen que colocar, y para ello tendrán que conservar sus mercados" y negociar acceso a nuevos, enfatizó Mejía.
 
"Ellos también tienen que hacer un esfuerzo para que sea un negocio ventajoso y bueno para ambas partes", observó el dirigente gremial colombiano.
 
"Desde mayo de 2004 -cuando empezaron las negociaciones del TLC- ha sido nuestra posición oficial, el gobierno lo sabe" añadió el dirigente de los  agricultores, subrayando que Washington debe comprender que se trata de "un tratado de libre comercio en donde se negocia entre dos partes. No es una  adhesión de Colombia a Estados Unidos".