El frío no fue un obstáculo para que las manifestaciones se mantengan hasta la madrugada de hoy en Quito.

En tres sectores de la capital unas 12.000 personas protestaron contra el régimen de Lucio Gutiérrez.

Al menos 12.000 personas participaron anoche en diversas manifestaciones contra el presidente Lucio Gutiérrez en esta ciudad.

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Las concentraciones se produjeron en el norte, centro y sur de la capital. La mayor protesta, que incluyó un masivo ‘cacerolazo’, se desarrolló en el sector de la Tribuna de los Shyris, adonde acudieron cerca de 10.000 manifestantes que gritaban “Lucio fuera”.

Pasadas las 21h15 un grupo de personas inició luego una marcha en dirección a la Corte Suprema de Justicia (CSJ). Unos 500 policías armados con escudos antimotines y bombas lacrimógenas también llegaron a la sede de la Corte para controlar a los manifestantes, que se retiraron del lugar a las 23h15 sin que se registraran incidentes.

En esta segunda noche consecutiva de protesta contra Gutiérrez participaron hombres, mujeres, niños y personas de la tercera edad.

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Cerca de 12.000 personas protagonizaron anoche varias marchas y concentraciones de protesta en contra del presidente Lucio Gutiérrez, en distintos puntos de la capital.

Desde las 21h00, unos 5.000 manifestantes se agruparon en la Tribuna de los Shyris, al norte de la ciudad, y bajo la consigna “Lucio fuera” reventaron globos en rechazo del régimen. “Fuera Bucaram y su edecán (Gutiérrez)” fue el grito que más se escuchó.

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Quince minutos después, se formó una marcha en dirección a la Corte Suprema de Justicia (CSJ) liderada, entre otros, por el hijo del ex asesor presidencial Alejandro Nájera, Mauricio Nájera, estudiante de la Universidad de las Américas.

Pese a que a las 22h30 llegaron unos 500 policías, los manifestantes, que portaban cacerolas vacías, permanecieron en la CSJ hasta pasadas las 23h00. Hasta entonces no hubo incidentes con la Policía, pero el número de manifestantes se duplicó (10.000).

La mayor parte de los opositores criticó las declaraciones de Gutiérrez que según dijeron, los llamó ”oligarcas”.

El primer ‘cacerolazo’, sorprendió a las autoridades locales y nacionales la noche del miércoles. A diferencia de ese día, anoche acudieron varias personalidades políticas como los concejales Antonio Ricaurte y Augusto Barrera, ambos de Pachakutik.

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En la tarde el alcalde Paco Moncayo indicó que la protesta ciudadana con ollas y tapas debe obligar al régimen a cambiar su rumbo.

Según dijo, el ‘cacerolazo’ deja sin sustento las actitudes del jefe de Estado de reducir las protestas y marchas a intenciones partidistas y de figuración política de sus líderes para las elecciones presidenciales del 2006.

La segunda noche de protesta contra Gutiérrez, en la que participaron hombres, mujeres, niños y personas de la tercera edad de diferentes barrios, empezó como sugerencia de un oyente de radio La Luna y las adhesiones fueron inmediatas.

Paralelamente, unas 1.500 personas participaron de una marcha que recorrió parte del sur de la ciudad. Inició a las 20h45 en el redondel de la avenida Rodrigo de Chávez y recorrió las avenidas Alonso de Angulo, Michelena y Mariscal Sucre.

El estruendo de las ollas y  pitos de vehículos matizó la protesta que estuvo acompañada de pancartas y gritos en contra del gobierno. La intención, según algunos participantes, era llegar a Carondelet. A las 22h00, el reclamo se extendió a los barrios de La Villaflora, San Carlos, Las Casas, La Gasca y el Valle de los Chillos.

En el norte, sector de la avenida de la Prensa y Fernández Salvador, unas 500 personas se sumaron a las manifestaciones y realizaron una marcha hacia el sector de La Y.

En tanto, el domicilio de Gutiérrez (en El Batán) al que acudieron los manifestantes la noche del miércoles, permaneció resguardado.

Anoche, el Ministerio de Educación anunció que hoy se volvían a suspender las clases en Quito.

Gobierno desiste en decretar emergencia

Gutiérrez dice que no disolverá el Parlamento.
El mandatario Lucio Gutiérrez lamentó ayer en su programa semanal ‘El presidente y su pueblo’, en Radio Nacional,  que el Congreso no haya dado soluciones para resolver la crisis jurídica que vive el país y aseguró que a pesar de eso, nunca ha pensado ni piensa disolver el Parlamento.