Según la ordenanza municipal que regula el uso del espacio y vía pública, es obligación de las personas mantener las vías despejadas. Además está prohibido que los transeúntes arrojen basura porque esta obstruye la vía pública.

El artículo seis de esta regulación prohíbe a los peatones y a las personas que se transportan en vehículos públicos o privados, arrojar desperdicios a la calle.

Las sanciones que se aplican por arrojar basura o por obstruir las vías va desde un llamado de atención hasta un día de detención y/o una multa del 2% al 50% del salario mínimo vital ($4), según su condición económica.