Los  Morante Paredes tienen otras dos denuncias en su contra. Ambas
son por estafa.

La Policía detuvo la madrugada de ayer a Patricia Paredes Moncayo,  acusada de maltratar física y psicológicamente desde hace ocho meses a su empleada doméstica Orfelinda Azucena Salvatierra Sellán, de 22 años.

La captura se produjo en la vivienda de la empleadora, ubicada en la ciudadela Urdenor 1, manzana 101, villa 48, en el norte de Guayaquil, señaló ayer el jefe de la Policía Judicial del Guayas (PJ-G), teniente coronel Rafael Yépez.

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Junto a Paredes, de 42 años, fue detenida también su hija, María Soledad Morante Paredes, de 20, por presunta complicidad, explicó Yépez, quien agregó que la empleada fue obligada a confesar supuestos robos con lo cual la amenazaban con hacerla apresar y no le pagaban su sueldo.

Paredes y su esposo, Julio Alberto Morante Sánchez, de 43 años, quien fue detenido a las 16h00 del lunes pasado, fueron presentados ayer por la Policía, junto a su hija.

Morante Sánchez fue capturado durante el allanamiento de su casa, ordenado por el juez 7º de lo Penal del Guayas, Jorge Guzmán Navarrete, y realizado por un fiscal y policías de la Unidad Antisecuestro y Extorsión (Unase). En la operación fue rescatada la joven doméstica, quien presenta heridas, hematomas y cicatrices recientes en el cuerpo.

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Según informó la Policía, los vecinos de los esposos Morante Paredes denunciaron el hecho, luego de escuchar constantemente que estos insultaban a Salvatierra, quien gritaba porque supuestamente la mantenían encerrada.

Sin embargo, durante su presentación en la PJ-G, visiblemente enojada, la pareja negó los cargos de tortura y plagio por los cuales el fiscal Miguel Cruz Otero les inició instrucción fiscal. Paredes dijo que los golpes a su empleada fueron causados por un novio de la joven “porque ella entraba y salía de su casa”.

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El abogado de los Morante, Bolívar Vargas Peña, indicó que la hija de la pareja, María Soledad Morante, está detenida ilegalmente por cuanto la instrucción fiscal que solicita la prisión de sus padres no la menciona, y agregó que probablemente fue detenida por otra denuncia que involucra a su madre en una estafa.

Los esposos Morante Paredes tienen otras denuncias en su contra. En junio y julio del 2004, dos mujeres los acusaron de estafarlas con más de  30.000 dólares.

Una de las denunciantes es María del Carmen Ojeda Mora, quien señaló en su escrito que el 12 de marzo del 2003 entregó a Morante 2.000 dólares, como representante de la Fundación Solidaridad International (Fusoin), para que le consiguiera trabajo a sus hijos a través de sus supuestas influencias con una hermana del presidente Lucio Gutiérrez.

Elizabeth Díaz Pilozo explicó en su denuncia que el 20 de octubre del 2003 entregó a Sara de Tello joyas valoradas en 29.674 dólares que fueron entregadas a Patricia de Morante para que se las vendiera a su círculo de amistades pero que ninguna de las dos mujeres le dio el dinero o le devolvió las alhajas. Paredes también negó estas acusaciones.

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