Un total de 45 internos del Centro de Rehabilitación Social de Varones (CRS-V) de Guayaquil continuaban ayer la huelga de hambre indefinida que se inició el pasado jueves con 20 reos.

Ellos esperan que el Tribunal Constitucional (TC) declare ilegal la figura de la detención en firme, que les permitirá acogerse a la garantía constitucional del artículo 24, numeral 8.

La norma deja en libertad a las personas que tienen más de seis meses (delito de prisión) o un año (delito de reclusión) presos sin sentencia.

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Byron Briones, presidente del Comité de Internos, señaló que hoy se sumarán a la medida otros cinco presos, con lo cual completarán 50. La huelga se cumple en la Sala del Comité de Internos, entre carteles que piden al TC que restituya la ley del 2x1 (rebaja en la mitad de la pena).

Briones aseguró que cinco reos (dos estadounidenses y los otros tres ecuatorianos) presentan leves signos de deshidratación por lo que está realizando gestiones para conseguir suero rehidratante.

La figura de la detención en firme afecta a unos 500 internos que también están en desobediencia judicial, lo que significa que no acudirán a las audiencias en los juzgados.

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