El ex DT del D. Cuenca dijo que algunos futbolistas no se esforzaban en los juegos como en las prácticas.

Pese a que dice que “hay que sonreírle a la vida”, Julio Asad tuvo problemas para ocultar la tristeza que se reflejaba en su rostro.

Se fue dolido del Deportivo Cuenca, con un sentimiento radicalmente opuesto al que experimentó cuando dirigió a los morlacos a la conquista de su primer título en la historia del fútbol ecuatoriano, apenas la temporada anterior.

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El Turco puso su cargo a disposición de la dirigencia del Deportivo Cuenca, que la aceptó el lunes pasado, luego de la goleada que los colorados sufrieron en el estadio Alejandro Serrano Aguilar ante el Deportivo Quito (4-0).

“Mi salida se debe a un grupo de jugadores que provocaron esta situación por no desempeñarse en los partidos del campeonato como lo hacían en los entrenamientos”, explicó Asad.

Cuenta el estratega argentino que en el medio tiempo del partido ante los chullas les dijo a sus futbolistas: “Si yo fuera un técnico nuevo diría que ustedes me están haciendo la cama (haciendo todo lo posible por echarlo, en la jerga futbolística)”.
Los tres goles capitalinos “confirmaron mi sospecha”, aseguró.

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“Me traicionaron”, sentenció Asad, que asume como un error “haber sido demasiado buena gente” con sus dirigidos. Sin dar nombres aseveró que “varios de ellos no respondieron a mi confianza”.

El entrenador reveló que incluso hubo una disputa física entre Marcelo Velazco y Cristian Carnero. Eso sucedió porque “quienes se esfuerzan por salir adelante reaccionan de esa forma frente a quienes son conformistas”.

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Duda cuando debe responder sobre la ingratitud en el fútbol: “Esto es así. Cuando los resultados son buenos la gente te ama, pero cuando fallas, la gente te odia”, dijo al referirse a ciertas reacciones en su contra, por parte de algunos aficionados después del encuentro contra el D. Quito.

Julio Asad se marchará a Argentina, para pasar un tiempo con su familia, su nieta y sus dos hijos. Y sin descartar volver a dirigir en Ecuador.

A diferencia de cuando condujo al título al Deportivo Cuenca, ahora se marcha “dolido. Los que no sudaron la camiseta me traicionaron”.

“Traición es una palabra que no se debería mencionar en aspectos futbolísticos. En su lugar el profesor Asad podría hablar de sentirse defraudado, pero por los jugadores que él mismo trajo al D. Cuenca para la nueva temporada. El equipo fue desmantelado respecto del año pasado. Los jugadores que llegaron no han podido suplir a los que se fueron. No tuve problemas con el técnico”.
Segundo Matamba
Defensa del D. Cuenca

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“El profesor tendrá sus razones para afirmar lo que dijo. Él sabrá qué jugadores dejaron todo en la cancha y quiénes no respondieron. Los malos resultados en el campeonato y en la Copa son responsabilidad de todos, especialmente de los once futbolistas en los que el técnico confiaba. En la cancha los responsables somos los jugadores. El DT solo nos guía”.
Damián Lanza
Arquero del D. Cuenca

 “Si Julio Asad utilizó la palabra ‘traición’ debe tener sus argumentos y estar seguro de ello. Pero también dijo que no lo traicionaron todos los jugadores y por eso debería señalar quiénes son. El tema es delicado. Él dijo que si no nos conociera diría que estábamos jugando para perder con el Quito. Dio la sensación que no queríamos hacer nada de lo que el profesor ordenaba”.
Xavier Klimowicz
Arquero del D. Cuenca

“Yo no estoy en los zapatos de él (Julio Asad) para decir que salió del Deportivo Cuenca porque los jugadores lo traicionaron o no. Pienso que esas declaraciones son cuestiones personales del ex estratega del Deportivo Cuenca. Solo Asad sabrá si en realidad los jugadores del Cuenca le dieron la espalda a su trabajo”.
Fernando Ugalde
Vicepresidente del D. Cuenca.