La figura del "Santo, el enmascarado de plata", un polifacético personaje que se convirtió entre los años 40 y 80 en uno de los héroes más populares de México y el resto de la región, será revivida dentro de la sección Zona de Culto de la Muestra de Cine Latinoamericano de la ciudad de Lérida.
 
Santo fue un campeón de lucha libre mexicana tradicional que se convirtió posteriormente en un personaje de ficción en historietas y películas, algunas de las cuales se podrán ver en la muestra, que comenzó el pasado primero de abril.
 
Entre las cintas que se exhibirán figuran "Santo contra la invasión de los marcianos", "Santo en el Museo de Cera" o "Santo contra el Doctor Muerte".
 
Este popular personaje rodó su primer filme en el año 1958 en La Habana (Cuba) y prolongó su trayectoria cinematográfica hasta 1982, sólo dos años antes de morir, con 65 años, aunque el espíritu de lucha de este héroe popular ha quedado reflejado en las 53 películas que protagonizó a lo largo de su vida.
 
Orlando Jiménez, estudioso de esta mítica figura que ha viajado hasta Lérida (noreste del país) para presentar el ciclo, ha explicado que la figura de Santo "se merece que se le rinda culto, por su rareza y exotismo".
 
Jiménez sostiene que Santo formó parte de la época de oro del cine mexicano, siendo la figura de un justiciero que representaba los valores morales y el bien, lo que hizo que alcanzara una popularidad en su país comparable a la Virgen de Guadalupe y Pedro Infante.
 
En opinión del estudioso mexicano, "lo más delirante de su cine es que no sabe qué es realidad y qué es ficción". En definitiva, "es un personaje que no ha pasado de moda", afirmó Jiménez.
 
Ahora, un hijo de Santo ha tomado el relevo y también rueda películas.